La necesidad de una mayor representación en los medios de comunicación de todos los grupos de identidad no es nueva, pero los avances en todos los grupos distan mucho de ser universales. En el caso de las personas con discapacidad, la representación sigue siendo escasa, y los avances a lo largo de los años pueden parecer lentos en el mejor de los casos.

Cuando CODA ganó el año pasado el Oscar a la mejor película, por ejemplo, dio a conocer al gran público el poder de la narración auténtica sobre hijos de padres sordos. Pero, al mismo tiempo, puso de relieve lo limitada que es la representación equitativa en el cine. Y es que Marlee Matlin, una de las protagonistas de la película, también ganó el premio a la mejor actriz por su papel en Hijos de un dios menor (1986) , laúltima vez que los Oscar premiaron a la comunidad de discapacitados.

La brecha de 35 años, marcada por películas con la misma actriz y el mismo tema de la discapacidad, pone de manifiesto que la inclusión equitativa de la discapacidad sigue siendo una aspiración lejana. La autenticidad es la otra consideración clave, y no todas las producciones se benefician de la participación de Matlin, defensora desde hace tiempo de las representaciones auténticas en la televisión y el cine, lo que abre la puerta a nuevos talentos como Alaqua Cox y Lauren Ridloff.

En la actualidad, las personas con discapacidad tienen un 34% más de probabilidades que la población general de considerar que no se incluye suficientemente a su grupo de identidad en los medios de comunicación, y más de la mitad afirman que las representaciones que ven son inexactas para sus grupos de identidad individuales. Para que nos hagamos una idea, el 26% de la población estadounidense vive con discapacidades.

La inclusión en los contenidos aumenta, pero desde una base baja

El volumen de contenidos que incluyen la discapacidad ha aumentado con el tiempo, aunque partiendo de una base muy baja. Hace aproximadamente un siglo, solo había una producción de vídeo con temática de discapacidad. Desde entonces, la inclusión de la discapacidad ha crecido, alcanzando su punto máximo en 2019, cuando se estrenaron 518 producciones. Hasta este año, 6.895 títulos de vídeo tienen atributos temáticos de discapacidad, pero eso representa solo el 4,22% de los 163.230 títulos con metadatos descriptores.

Entre los contenidos de vídeo disponibles, la representación de la discapacidad es mayor en los largometrajes, que representan algo menos del 60% de los contenidos de vídeo con temas de discapacidad. Del contenido de vídeo que incluye descriptores de vídeo, sólo el 4% tiene descriptores que señalan la discapacidad y los atributos relacionados con la discapacidad. Si se excluyen los avances y los deportes y se combinan las categorías de películas, el cine representa algo menos del 81% de los contenidos que incluyen la discapacidad y las series/miniseries algo más del 19%.

Aumentar la inclusión en todos los medios de comunicación es importante, pero cuando se trata del consumo de medios, los estadounidenses son los que más tiempo pasan con la televisión en directo, casiel doble del tiempo que pasan con la televisión conectada. Con algo menos del 20% de las series/miniseries con contenido inclusivo de temas de discapacidad, no es de extrañar que casi el 50% de las personas con discapacidad sientan que su grupo de identidad está infrarrepresentado en la televisión.

Es importante señalar que la simple presencia de un personaje con discapacidad no es suficiente. Las personas con discapacidad quieren ver representadas en los contenidos las auténticas realidades de la vida cotidiana. En particular, nuestro estudio más reciente sobre las actitudes en la representación televisiva reveló que las personas con discapacidad tienen un 52 % más de probabilidades que la población general de decir que la representación de su grupo de identidad es inexacta.

Para contextualizar la importancia de la inclusividad y la representación auténtica, consideremos las opiniones de la comunidad de discapacitados sobre los anuncios que aparecen durante la programación inclusiva y los anuncios en los que aparecen personas con discapacidad: la comunidad tiene un 17% más de probabilidades de interactuar con la marca cuando el anuncio se coloca dentro de un contenido inclusivo y en él aparecen personas de la comunidad de discapacitados.

Y aunque las personas con discapacidad creen que el streaming tiene las opciones más inclusivas, el 24% no ve diferencias en la representación relevante de una plataforma a otra. Tampoco hay un género que destaque como el que mejor muestra la representación de la discapacidad.

Ante la escasez de contenidos de vídeo para satisfacer los deseos de la comunidad, no es de extrañar que las personas con discapacidad se dirijan cada vez más a las redes sociales -y a sus personas influyentes- para establecer vínculos más fuertes con sus comunidades, entablar relaciones, concienciar y vivir su verdadera vida. Y los índices de participación demuestran que los influencers están llenando un vacío importante.

Por ejemplo, nuestro reciente informe sobre marketing de influencers reveló que solo el 6,15 % de los influencers en Instagram tienen una tasa de interacción del 20 % o más. Alyssa Cleland, sin embargo, ha acumulado 140.000 seguidores en Instagram y sus publicaciones generan una impresionante tasa de interacción del 67%. Terra Jolé encabeza la lista de seguidores, con 918.000. 

El otro aspecto importante relacionado con el marketing de influencers es que los datos de las normas de impacto de marca del primer trimestre de 2022 de Nielsen revelaron que una media del 80% de las personas que vieron un anuncio de influencers fue capaz de recordar haber visto marcas que aparecían en anuncios. Los datos también destacan que los anuncios impulsan un aumento de 9 puntos tanto en la afinidad de marca como en la intención de compra.

Mucho ha cambiado en el mundo entre los estrenos de Children of a Lesser God y CODA, pero los datos relativos a la inclusión y la representación de los distintos grupos identitarios sugieren que el verdadero progreso en los principales medios de comunicación sigue siendo difícil de alcanzar.

Esta falta de progreso repercute en el consumo de los medios de comunicación, ya que, según nuestro estudio Actitudes sobre la representación en televisión 2021, el 48 % de los encuestados estaría más dispuesto a ver contenidos en los que aparezcan sus respectivos grupos de identidad. El público no solo busca contenidos más representativos, sino que también espera que la industria cambie la forma en que se representa la discapacidad en esos contenidos. Teniendo esto en cuenta, películas como CODA deben estar más presentes que una vez cada 35 años si queremos que los medios de comunicación incluyan más a la comunidad de discapacitados.

Notas

1. Estudio Nielsen Attitudes on Representation on TV, abril de 2022
2. Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
3. Descriptores de vídeo Gracenote
4. Datos de vídeo Gracenote
5. Nielsen InfluenceScope